Historia

Vamos otra vez, la historia de siempre.
Un sueño, y todo pasa a cambiar a realidad,
Pero, ¿Cómo evitar que el pasto sea verde?
Solo un metro evita sentir una distinta libertad
Que llega cuando, en realidad, otra acaba.

Un cigarro, quema, una cerveza, amarga,
Pero una visión confunde, aunque sea clara.
Y las palabras están de sobra al mirar la ventana,
Entonces, ¿qué sentido tiene fumar, beber, hablar,
Pensar, actuar, respirar, correr… sentir?

¿Has visto que si estás solo así se suele pensar?
Y  la compañía no hace nada más que solucionar.
Pero la compañía no la elijo yo, debo hallarla.
Hay compañías que ya están acompañadas,
¿Será entonces que debo simplemente pelearlas?

Y entonces, volvemos de nuevo a la historia de siempre.
El viejo y el mar, que leía novelas de amor bajo el sol,
Mientras el cretino se lleva la ganancia, sin siquiera vencerle.
¿Para qué esforzarse dado el caso postulado? ¿No?

Aquí me cuestiono, ¿Cuánto es mucho? ¿Cuánto es poco?
El cielo brilla tras las nubes en esta ciudad oscura en gas
Y no sabemos cuanto es, solo sabes que puede engañar al ojo.
Entonces la compañía te puede ayudar a la duda saldar.

Y terminamos otra historia, y con más preguntas,
¿Si no consigo la compañía?
Y así, me ahogo en un vaso de agua que está vacío.
¿Me acompañas y respondes mis dudas burdas?
Mujer azul, ¿escuchas mi plegaria infinita?
Mujer bailante, no me dejes en olvido.